To view this video please enable JavaScript, and consider upgrading to a web browser that supports HTML5 video
23 de julio, 2021 14:10
00:00 / 05:00
73 reproducciones
Palo era un artista, como Gabo Ferro, Rosario Bléfari y Willy Croock. Cruzaban el arte con la vida en lo que componían, cantaban, tocaban, actuaban, escribían. No eran sólo músicxs. Eso se percibió siempre en sus historias y sus obras. Eso es lo que perdimos, el acceso a esa vitalidad creativa. Eso duele. Y los despedimos durante este año pandémico. Se murió el Palo, lloraban las redes ayer. ¿Pero como puede ser? Si hace unos meses lo vímos en Córdoba. En el verano alternó shows y talleres de composición en las sierras. Si en marzo durante un fin de semana largo tocó por acá sin descanso, compartiendo canciones, saberes y experiencias. Estaba armando un disco nuevo, hacía yoga, tocaba, ensayaba, se fue a vivir al conourbano, y se muere haciendo un tramite en la ciudad que tanto padeció. El tema Castro Barros-Miserere - Norte es la enumeración mnemotécnica de estaciones que cruzaba cuando era cadete. Recuerdo también que el disco Espiritango de Los Vistantes abre con la canción La Musa en cuyo final repite en un mantra rockero “La muerte no existe”. Palo tenia la mejor onda con Córdoba. Debutó con Los Visitantes en Varsovia. Y en el 1er Nuevo Rock Argentino conoció a los Rastrojero Diésel y después hicieron una gira nacional juntos. Desde entonces Palo venía seguido. Lo recuerdo en un asado en Intiyako en la casa del Perro Emaides, amigo y productor de muchos de sus shows. Se nos fue el Palo, un visitante entrañable y raro que vino a cantarnos “Todos somos el envíado”. "Bajaremos incontenibles hasta donde el diablo pueda olernos ¿Merezco morir hoy? Si" ¡Hasta siempre! Leer más
Palo era un artista, como Gabo Ferro, Rosario Bléfari y Willy Croock. Cruzaban el arte con la vida en lo que componían, cantaban, tocaban, actuaban, escribían. No eran sólo músicxs. Eso se percibió siempre en sus historias y sus obras. Eso es lo que perdimos, el acceso a esa vitalidad creativa. Eso duele. Y los despedimos durante este año pandémico. Se murió el Palo, lloraban las redes ayer. ¿Pero como puede ser? Si hace unos meses lo vímos en Córdoba. En el verano alternó shows y talleres de composición en las sierras. Si en marzo durante un fin de semana largo tocó por acá sin descanso, compartiendo canciones, saberes y experiencias. Estaba armando un disco nuevo, hacía yoga, tocaba, ensayaba, se fue a vivir al conourbano, y se muere haciendo un tramite en la ciudad que tanto padeció. El tema Castro Barros-Miserere - Norte es la enumeración mnemotécnica de estaciones que cruzaba cuando era cadete. Recuerdo también que el disco Espiritango de Los Vistantes abre con la canción La Musa en cuyo final repite en un mantra rockero “La muerte no existe”. Palo tenia la mejor onda con Córdoba. Debutó con Los Visitantes en Varsovia. Y en el 1er Nuevo Rock Argentino conoció a los Rastrojero Diésel y después hicieron una gira nacional juntos. Desde entonces Palo venía seguido. Lo recuerdo en un asado en Intiyako en la casa del Perro Emaides, amigo y productor de muchos de sus shows. Se nos fue el Palo, un visitante entrañable y raro que vino a cantarnos “Todos somos el envíado”. "Bajaremos incontenibles hasta donde el diablo pueda olernos ¿Merezco morir hoy? Si" ¡Hasta siempre!
Lo sentimos. No tenemos grabaciones para esta radio en el instante de tiempo solicitado. Puede clickear en 'Cambiar' para ir a otro día u horario. Esta radio la grabamos Lun-Dom 0-23:59