Don Braulio se encariño con la radio y volvió a los estudios de la Caja Negra. Postuló a su Gallina para vender saludos como los famosos que los cobran. Enseñó a hacer Asado en Radio y hasta aceptó las sugerencias de películas de Sebastián Bandera, aunque no entendió la trama de ninguna! Y salió a recorrer Montevideo pero en la rambla se agarró a sopapos con los mosquitos. Igual le dio el humor para hacer sus sorteos.